Aunque tanto Donald Trump como Joe Biden lograron allanarse el camino hacia la casi asegurada revancha entre ellos en otoño, ambos recibieron advertencias de lo que podría influir en los resultados finales.

El 5 de marzo en Estados Unidos se celebró el supermartes, una de las etapas más importantes de las primarias para determinar a los candidatos a la presidencia. Durante esta jornada, 16 estados y un territorio eligen a más de un tercio de los delegados necesarios para proclamar a los candidatos en las convenciones de los demócratas y republicanos.

Tras la llegada de los primeros resultados, tanto el presidente actual, Joe Biden, como el exmandatario Donald Trump lograron victorias importantes en el supermartes y se acercan más a su aparentemente inevitable revancha. Además, Nikki Haley, exgobernadora de Carolina del Sur, ya ha anunciado su retirada de la carrera presidencial por el Partido Republicano.

Sin embargo, ambos candidatos vieron signos de posibles debilidades en las elecciones generales previstas para otoño de este año. Hasta el momento, las conclusiones clave son:

Trump gana a lo grande, pero...

En sus intentos por dominar la contienda en cuanto a la nominación republicana, Donald Trump perdió tan solo en Vermont, ante su rival, la exgobernadora de Carolina del Sur, Nikki Haley (que ganó también en Washington, D.C., durante el fin de semana). En el resto de los estados, la aprobación de la candidatura del expresidente se situó por encima del 80 %.

No obstante, según encuestas recientes, aproximadamente 3 de cada 10 votantes de las primarias republicanas consideran que Trump no sería apto para ser presidente si es declarado culpable de algún delito. 

Cerca de un 23 % de los votantes en las primarias de California expresaron esa opinión, al igual que más del 30 % en estados como Iowa y Carolina del Sur.

Biden domina a sus rivales

Mientras, Joe Biden ganó fácilmente a sus rivales demócratas obteniendo cerca del 80 % de los votos. Además, tiene muchos puntos para hacerse con el apoyo de sus detractores dentro del partido.

Por otro lado, se destaca que los hispanos y otros votantes definidos como 'no blancos' son el núcleo del electorado demócrata. Trump, sin embargo, está ganando terreno en ese sector, particularmente, en lo que respecta a la clase trabajadora. De ese modo, pudo superar a Haley entre esos votantes —72 % contra 23 %— y, de acuerdo con las encuestas, le estaría pisando los talones a Biden. 

Advertencias para Trump

Los suburbios podrían representar un problema para Trump, ya que el apoyo más sólido de Haley se registró precisamente en esas áreas, así como en ciudades y pueblos universitarios. 

Los votantes con educación superior en esas regiones suelen inclinarse por los demócratas y es posible que el apoyo a Haley suponga una debilidad para el empresario político. Por ejemplo, en Carolina del Norte, el 81 % de las personas que respaldaron a Haley aseguraron que no votarían por Trump en noviembre.

Fallos políticos de Biden

Algunos pasos que dio Biden en la arena política no pasaron desapercibidos para su electorado. El apoyo a Israel en la ofensiva contra la Franja de Gaza y la negativa a solicitar públicamente un alto el fuego podría influir negativamente en la votación en ciertos estados en los que su victoria aún no está definida.

En Minnesota, que tiene una significativa cantidad de población musulmana, alrededor del 89 % de los votos contados fueron los denominados 'no comprometidos' con la candidatura de Biden. Esa campaña, que se inició en el estado de Michigan ante el envío de armas a Tel Aviv, superó este martes los 45.000 sufragios, una cifra que representa casi al 20 % de los votantes de Minnesota. 

En otros estados, como Carolina del Norte, los 'no comprometidos' también representaron una amplia proporción de los votos.