POR: Agencia DW
Organizaciones sociales, sindicatos y personas jubiladas marcharon este lunes (18.09.2023) en Caracas y otras diez ciudades de Venezuela para exigir un "salario digno", respeto al derecho a la libertad sindical y el cese de la "criminalización" de la protesta.
El presidente de la Asociación de Profesores de la Universidad Central de Venezuela (APUCV), Gregorio Afonso, dijo a la agencia EFE que docentes, organizaciones gremiales y sindicales del sector público se movilizaron en "Caracas y en 10 ciudades más" para exigir "salarios y pensiones dignas", entre otras demandas.
"Los salarios y las pensiones en Venezuela son las más bajas del planeta", expresó Afonso, quien señaló que el ingreso del profesor universitario que está en el "más alto escalafón" y con mayor dedicación "no supera los 16 dólares mensuales".
A su juicio, esta situación es "absolutamente inaceptable" en "un contexto en el que el Estado" reporta un incremento de la producción petrolera -la principal fuente de divisas de la nación- y de la recaudación por la vía del cobro de impuestos, por lo que el docente aseveró que hay "recursos para atender las demandas de los trabajadores".
En la capital, los grupos de manifestantes corearon consignas como: "No estamos desfilando, estamos protestando" y "Quiero un salario digno y vivir con dignidad", a la vez que alzaban pancartas con mensajes como "Por un salario igual a la canasta básica". También, reclamaron el "derecho a la negociación colectiva" y rechazaron la condena a 16 años de prisión dictada en agosto a seis dirigentes sindicales.
La ONG PROVEA informó que los grupos manifestantes fueron a la sede de la Fiscalía General en Caracas para entregar un documento en el que exigieron el "respeto a la libertad sindical y cese a la criminalización de la protesta".
Afonso sostuvo que el 20 de septiembre habrá una "jornada de protestas de diferentes sectores" en varias universidades, y prevén intensificar "estas acciones hasta poder alcanzar un aumento salarial que permita restablecer las instituciones y la educación pública" y evitar que los "jóvenes sigan saliendo del país".
En Venezuela, no hay aumento del salario mínimo desde marzo de 2022, cuando el Gobierno lo subió a 130 bolívares al mes, casi 30 dólares en ese entonces, un monto que se ha reducido 87 % hasta 3,86 dólares, como consecuencia de la devaluación de la moneda local frente a la divisa estadounidense, usada en el país para fijar la mayoría de los precios. Entretanto, el costo mensual de la canasta básica de alimentos, calculada para una familia de cinco personas, supera los 500 dólares (467 euros al cambio de hoy), según estimaciones independientes.