SEATTLE (AP) — Los maquinistas sindicalizados de Boeing votaron el lunes a favor de aceptar una oferta de contrato y poner fin a su huelga después de más de siete semanas, despejando el camino para que el gigante aeroespacial reanude la producción de su avión de pasajeros más vendido y genere el dinero que tanto necesita.

Los líderes del distrito de la Asociación Internacional de Maquinistas y Trabajadores Aeroespaciales en Seattle dijeron que el 59% de los miembros que votaron acordaron aprobar la cuarta oferta formal de la compañía y la tercera se sometió a votación. El acuerdo incluye aumentos salariales del 38% en cuatro años, y bonos de ratificación y productividad.

Sin embargo, Boeing se negó a cumplir con la demanda de los huelguistas de restaurar un plan de pensiones de la compañía que fue congelado hace casi una década.

La ratificación del contrato en la víspera del día de las elecciones despeja el camino para que un importante fabricante y contratista del gobierno de Estados Unidos reinicie las líneas de montaje del noroeste del Pacífico que la huelga de los trabajadores de la fábrica ha dejado inactivas durante 53 días.

Según el sindicato, los 33.000 trabajadores que representa pueden volver al trabajo tan pronto como el miércoles o hasta el 12 de noviembre. El CEO de Boeing ha dicho que podría llevar "un par de semanas" reanudar la producción, en parte porque algunos podrían necesitar reentrenamiento.

Los líderes del Distrito 751 de IAM respaldaron la última propuesta, diciendo que pensaban que habían conseguido todo lo que podían a través de las negociaciones y la huelga.

"Es hora de que nuestros miembros aseguren estos logros y declaren la victoria con confianza", dijo el distrito sindical antes de la votación del lunes. "Creemos que pedir a los miembros que permanezcan en huelga por más tiempo no sería correcto, ya que hemos logrado mucho éxito".

El salario anual promedio de los maquinistas de Boeing es actualmente de 75.608 dólares y eventualmente aumentará a 119.309 dólares bajo el nuevo contrato, según la compañía.

Una huelga continuada habría sumido a Boeing en un mayor peligro e incertidumbre financiera.

La presidenta ejecutiva Kelly Ortberg, una persona externa que comenzó a trabajar en Boeing en agosto, ha anunciado planes para despedir a alrededor del 10% de la fuerza laboral, unas 17.000 personas, debido a la huelga y una serie de otros factores que disminuyeron la reputación y la fortuna de la compañía este año.