Manuel Figuera, exjefe del Servicio Bolivariano de Inteligencia Nacional (Sebin), aseguró que la entidad “es una máquina de terror, persecución y muerte, cuyos mandos están al servicio de Nicolás Maduro”. Aseveró, además, que el gobernante chavista "se refugia en una Fuerza Armada y policías corrompidas".

El exdirector del Servicio Bolivariano de Inteligencia Nacional (Sebin), Manuel Cristopher Figuera, aseguró que el organismo “es una máquina de terror, persecución y muerte, cuyos jefes están al servicio de Nicolás Maduro”.

Figuera, un chavista que luego se declaró desertor del régimen de Maduro, denunció que en el Sebin “utilizan todos los recursos, medios y capacidades de este y otros organismos del Estado para mantenerlo en el poder a cualquier costo”, sindicándolo de estar operando con grupos paramilitares fuera de Venezuela y que “están involucrados en crímenes como el asesinato del teniente Ronald Ojeda en Chile”. 

El teniente venezolano Ronald Ojeda, quien fue secuestrado y posteriormente asesinado en Chile.

El exjefe de la Inteligencia venezolana fue una figura clave en el aparato represivo del gobierno de ese país, hasta que se alejó del organismo en 2019 y comenzó a apoyar la lucha contra Maduro.

En entrevista con el diario argentino La Nación, Figuera describió cómo, desde dentro del aparato de seguridad, intentó resistir las “órdenes injustas” y denunció las prácticas represivas que, según él, se dictan directamente desde el gobernante venezolano.

“Nicolás Maduro es el responsable y quien da las órdenes; él mismo lo ha dicho”, aseveró Figuera, quien por su seguridad esconde su paradero.

“Estado delincuente”

En el mismo contexto, manifestó que represión en Venezuela en los últimos 10 años “ha evolucionado a pasos agigantados. La ciudadanía ha sido traicionada por el incumplimiento de las promesas electorales y, de manera sistemática, se le ha negado la posibilidad de hacer un cambio político por la vía pacífica. Nicolás Maduro se refugia en una Fuerza Armada y policías corrompidas, así como en organismos de inteligencia y contrainteligencia que actúan como ejércitos de ocupación contra su propio pueblo”.

Agregó que el gobernante venezolano “también se ha aliado con grupos delictuales nacionales y foráneos, convirtiendo al Estado en un Estado delincuente donde se aplica el terrorismo de Estado en su máxima expresión. Ha llegado al extremo de encarcelar periodistas y comunicadores por informar la verdad, cerrar medios de comunicación y bloquear redes sociales para mantener a la ciudadanía desinformada y aislada”.

Figuera expresó, además, que los colectivos y otros grupos paramilitares operan conjuntamente con organismos de seguridad y están equipados y entrenados por ellos. “También actúan fuera de las fronteras venezolanas y están involucrados en crímenes como el asesinato del teniente Ronald Ojeda, en Chile. Estos grupos tienen alianzas con guerrilleros como las FARC y el ELN de Colombia, quienes secuestran a ciudadanos venezolanos opositores y los entregan a las fuerzas represivas de Nicolás Maduro”.

Manifestó que tras las irregulares elecciones presidenciales del 28 de julio la represión se acrecentó sobre los opositores.

“Se violan los derechos a protestar y, cuando son detenidos injustamente, se les niega el debido proceso de manera consuetudinaria y sistemática. Todo es ordenado por Nicolás Maduro, y algunos funcionarios inescrupulosos de alto rango actúan por cuenta propia, generando un caos social que beneficia a la clase gobernante”, puntualizó.