SAN JUAN, Puerto Rico (AP) — El gobernador de Puerto Rico dijo el martes que el presupuesto del territorio para el próximo año fiscal será el más grande de su historia, 14.000 millones de dólares, con nuevos fondos para ayudar a la población anciana de la isla, reducir la violencia e impulsar programas de energía solar, entre otras cosas.
El gobernador, Pedro Pierluisi, hizo el anuncio durante su discurso anual sobre el estado del territorio, en el que habló durante más de una hora y recalcó los logros de su gobierno antes de buscar la reelección este año.
Señaló que la economía puertorriqueña se ha fortalecido después de que el gobierno declarase la mayor bancarrota municipal en la historia de Estados Unidos hace siete años, aunque la deuda de 9.000 millones de dólares de la compañía eléctrica estatal aún no se ha reestructurado.
Pierluisi también defendió las labores de reconstrucción tras el huracán María, que golpeó la isla como una poderosa tormenta de categoría 4 en septiembre de 2017, y una serie de fuertes sismos que remecieron el sur de Puerto Rico desde finales de 2019.
“Aún nos queda mucho por hacer. Y yo sé que nuestro pueblo quiere y necesita más de su gobierno, y todavía está afectado por todo lo que pasamos años atrás”, dijo. “Yo lo entiendo, pues el camino ha sido duro”.
Se han reparado o reconstruido más de 6.000 casas y otras 3.000 están en proceso, señaló. Además hay 169 proyectos en marcha relacionados con la reconstrucción de la red eléctrica y otros 37 proyectos de gran escala para sustituir subestaciones eléctricas, postes de luz y líneas de transmisión y distribución están en una fase avanzada de diseño.
Pero el lento ritmo de la reconstrucción, atribuido en parte a un retraso en los fondos federales durante el gobierno de Donald Trump, ha frustrado y enojado a muchos puertorriqueños.
“El atraso de las obras de reconstrucción es tan vergonzoso que en lugar de estar pautando anuncios sobre los proyectos deberían estar pautando anuncios de disculpas por la inacción de los trabajos”, dijo Jesús Manuel Ortiz, presidente del Partido Popular Democrático, el principal grupo de oposición.
Otro miembro del partido, Rafael “Tatito” Hernández, presidente de la Cámara de Representantes de la isla, señaló que la inmensa mayoría de los proyectos no se han completado.
“Es importante señalar lo que no habló”, apuntó Hernández.
En su mensaje, Pierluisi también anunció ayudas para una población que envejece con rapidez. Las personas de 65 años o más suponen casi un cuarto de los 3,2 millones de personas, uno de los porcentajes más altos del mundo.
El Departamento de Familia incrementará los subsidios medios para residentes de largo plazo en centros asistidos, de 1.300 a 1.900 al mes. Además, Pierluisi dijo que destinaría 5 millones de dólares al año durante los próximos cinco años para partidas de hasta 250.000 dólares para ampliar las residencias de mayores.
En una iniciativa bien recibida por muchos que se han quejado durante años sobre el estado de la infraestructura de carreteras de la isla, Pierluisi también anunció que lanzaría una plataforma en línea este mes donde la gente podrá alertar al gobierno de socavones, puentes peligrosos y farolas dañadas, entre otras cosas.
El gobernador terminó su discurso reclamando una vez más que Puerto Rico obtenga la condición de estado, una antigua reclamación de su Partido Nuevo Progresista.
Señaló que los puertorriqueños aún sufren discriminación en Medicaid y Medicare, prestaciones de la seguridad social y asistencia nutricional, entre otras cosas. “En fin…todos los derechos y beneficios que nos merecemos como ciudadanos americanos”.
Aunque los partidarios de Pierluisi celebraron sus anuncios, una junta de control federal que supervisa las finanzas puertorriqueñas tiene la última palabra sobre el presupuesto de la isla y cómo se invierten los ingresos.
La junta se creó después de que el territorio estadounidense anunciara en 2015 que no podía pagar su deuda de más de 70.000 millones de dólares, acumulada durante décadas de corrupción, mala gestión y endeudamiento excesivo.